El Canal de Panamá ha experimentado una caída del 30% en el tránsito de tanqueros que transportan gas natural licuado (GNL), impulsado por la débil demanda asiática de GNL estadounidense y las limitadas exportaciones de la Costa del Golfo de EE.UU. desde la explosión en una terminal en junio, dijo la autoridad de la vía acuática durante esta semana, reportó Reuters.
La planta de Texas de Freeport LNG, segundo exportador estadounidense, sigue cerrada desde una explosión a principios de junio y su reinicio parcial no se espera hasta octubre, lo que reduce la capacidad de exportación de Estados Unidos, incluso en medio de la boyante demanda de Europa.
Antes del incidente, el Canal de Panamá -la principal vía de navegación para las exportaciones energéticas de Norteamérica a destinos asiáticos- ya había visto reducido el tránsito de tanqueros GNL, ya que los productores estadounidenses se centraron en el suministro a clientes europeos para sustituir el gas ruso.
“Hemos tenido una reducción del 30% en el tránsito en los últimos nueve meses”, dijo la administradora adjunta de la Autoridad del Canal de Panamá, Ilya Espino de Marotta en una entrevista. “Gran parte del GNL de la Costa del Golfo de Estados Unidos que tradicionalmente iba a Asia se está desviando a Europa”, detalló.
Las temperaturas más cálidas en Asia han hecho descender la demanda de GNL, especialmente los cargamentos procedentes de destinos lejanos, que pagan fletes más elevados.
Pero el menor número de tanqueros GNL que solicitan el paso por el Canal se ha visto compensado por un mayor tránsito de otro tipo de buques, incluidos los tanqueros GLP y los cruceros, cuya actividad se está recuperando tras la pandemia.
Por otro lado, el tonelaje de portacontenedores Neopanamax que atraviesan la vía también descendió, pero aumentó el de los buques más pequeños, añadió. Así pues, la congestión portuaria que obligó al transporte marítimo en buques más pequeños también hizo mella en el desempeño del Canal, que tiene previsto ser neutro en carbono para 2030, según la administradora.
Al finalizar su año fiscal en septiembre, el Canal de Panamá espera haber observado el tránsito de 520 millones de toneladas de bienes, por encima del récord de 516 millones de toneladas del año fiscal anterior, pero por debajo del objetivo de la Autoridad de 535 millones de toneladas, dijo Espino de Marotta.
Para el año fiscal que comienza en octubre, el Canal de Panamá espera una recuperación de los pasajes de buques de GNL a través de la vía acuática, y un alto porcentaje de buques que reservan cupos de paso, que en la actualidad se sitúa en torno al 90%.
Por MundoMarítimo